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Las carreteras inteligentes dan un paso más para ser una realidad


El proyecto creado por Roosegaarde y Heijmans incluye líneas brillantes y un carril para recarga eléctrica.

por: Diana Silva Diana Silva

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Pronto, las líneas blancas en las carreteras quedarán en el pasado. Las próximas carreteras serán más brillantes, gracias a una innovadora propiedad de brillar en la obscuridad.



Se trata de una propuesta diseñada y desarrollada por Studio Roosegaarde y Heijmans Infrastructure para realizar una Smart highway o autopista inteligente, en la cual las clásicas líneas o postes son reemplazados por líneas brillantes, las cuales absorben la luz diurna y resplandecen en la oscuridad.


Daan Roosegaarde y el Director de Heijmons



Este prototipo, presentado en la Semana Holandesa del Diseño celebrada en Eindhoven, ya funciona en los Países Bajos a lo largo de un tramo de medio kilómetro en la carretera N329, a su paso por Oss en el condado de Brabante, al sur del país.



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Estas dos compañías se encuentran desarrollando, conjuntamente, carreteras más sostenibles, seguras e intuitivas, dotadas de luces interactivas, energía inteligente y nuevas señales de tráfico que se adaptarán a las distintas situaciones de circulación.



Como bien comentábamos, la principal innovación son las marcas viales que brillan en la oscuridad, obtenidas mediante un polvo fotoluminiscente integrado en la pintura de carretera, cuyo brillo tiene una duración de hasta 10 horas, una vez que se ha alimentado de la luz solar.



En los próximos años se incorporarán mayores adelantos tecnológicos, como las marcas del clima que aparecerán sobre el asfalto cuando la temperatura alcance cierto nivel.



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Dicho efecto se obtiene gracias a una “pintura dinámica”, que se vuelve visible en respuesta a las vacilaciones de la temperatura, permitiendo a la superficie del camino comunicar información adecuada y relevante sobre el tráfico, directamente al conductor.



Por ejemplo, cuando el asfalto está frío y resbaladizo, sobre su superficie aparecen figuras de cristales de hielo, advirtiendo del riesgo.



Los creadores llamaron a este proyecto Ruta 66, aludiendo a la histórica autopista principal de Estados Unidos que recorría el país de este a oeste a lo largo de aproximadamente 4,000 km.



Las compañías aún se encuentran estudiando la posibilidad de abrir más tramos carreteros, ya sea en Países Bajos o en otros estados, algo que esperan suceda en un corto plazo.



Por otra parte también se tiene planeado que se ocupe un carril preferencial para aquellos que manejen un auto eléctrico. Dicho carril tendrá la posibilidad de recargar el vehículo durante el recorrido.



 

 

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