Superar el Moto G4 Plus, su gran reto
La presentación de este teléfono se dio hace apenas unos días durante la edición 2017 del Mobile World Congress, en Barcelona, y créanme que he estado atento a sus comentarios, sobre todo en lo que respecta al diseño y las especificaciones de este teléfono.
Y es que el cambio más evidente está justo en el diseño del nuevo Moto G, que por primera vez tiene un cuerpo metálico, aunque aún integra algunos elementos de plástico, como el marco. No podemos negar que por una parte sí luce un tanto más premium, pues también adopta algunos rasgos de la familia Moto Z, pero por otro lado también pierde ese toque juvenil al que la marca nos tenía acostumbrados con esta familia de teléfonos.
Una de las razones principales por las que Moto realizó este importante cambio en el Moto G tiene que ver con un estudio que realizaron y cuyos resultados demostraron que los consumidores en México prefieren acabados metálicos para sus teléfonos.
Sea como sea, este es el nuevo Moto G y estará disponible sólo en dos colores, este dorado que tenemos para la prueba y otro en gris oscuro, que personalmente me atrae más. Por lo que si se lo preguntaban, no, ahora no es posible configurarlo en Moto Maker.
Del lado derecho tenemos el botón de bloqueo, encendido y apagado y, un poco más arriba están las teclas de volumen, ambas muy al alcance del dedo índice izquierdo o del pulgar derecho.
Arriba tenemos la ranura para las tarjetas SIM, y lo digo en plural porque el teléfono llega con esa opción, además de la ranura para la tarjeta microSD, que puede ser de hasta 128GB. A diferencia de la generación anterior, la carcasa trasera ya no se puede quitar, por lo menos en la versión Plus, y es por eso que tiene esta charola, además ahora usa tarjeta nano SIM y no micro SIM.
Otro cambio en el diseño está en la salida de audio para los audífonos, que ahora está abajo del lado izquierdo, justo a un lado del puerto de carga microUSB.
Finalmente, pero no menos importante, está el sensor de huellas digitales, que también cambió su forma de un cuadrado a un óvalo. Esto tiene que ver básicamente con que ahora se puede utilizar en lugar de la barra de navegación de Android, es decir, puedes configurar el teléfono para eliminar de la pantalla el botón de atrás, del de home y el de multitarea y aprovechar más el espacio del display. Con esta configuración, si deslizas tu dedo de derecha a izquierda es como si tocaras el botón de atrás, si lo haces de izquierda a derecha abres el multitarea y si sólo lo tocas entonces irás a la pantalla de inicio.
Quizá no quieras usarlo así y prefieras los botones o quizá prefieras más pantalla, lo bueno de esto es que puedes configurarlo y así cada quien lo usa a su gusto.
En cuanto al desempeño del sensor no tengo queja alguna, funciona bien, rápido y no importa en qué posición pones el dedo, el teléfono se desbloquea o bloquea sin problema.
Vale la pena recordar que desde la generación anterior Moto G no es sumergible, sólo resistente a salpicaduras, así que no se les vaya a ocurrir meterlo al agua, eso sí, podrán usarlo bajo una lluvia leve.
Pantalla de menor tamaño
Ahora vamos a la pantalla, que de nuevo cambia, ya no es de 5.5 pulgadas, sino de 5.2 en el caso del Moto G5 Plus y de 5 cerradas en el caso del Moto G5, al cual dedicaremos después una reseña. La resolución se mantiene en Full HD y se mejoró en la densidad de pixeles por pulgada y se mantiene protegida por cristal Gorilla Glass de tercera generación.
De la pantalla no tengo más que comentarios positivos. Los colores lucen bien, cuenta con tecnología IPS, lo que brinda buenos ángulos de visión y me parece que cumple su función cabalmente, sobre todo pensando en la gama en la que se encuentra este teléfono. Además, su consumo energético, como en el caso del G4, no es tan alto.
De hecho de una vez les cuento sobre la batería. El Moto G5 Plus cuenta con un pila de 3000 mAh que de verdad me tiene sorprendido. Los días que los he estado probando lo he desconectado a eso de las 7 de la mañana, he usado Waze, WhatsApp, Facebook, Chrome y recibido una que otra llamada, incluso he jugado durante una hora seguida en el tráfico mi placer culpable: Clash Royale, con todo y eso, he llegado a las 8:30 de la noche con un 40% de batería, así que saquen sus conclusiones.
Ahora, si usas el teléfono de formas más ruda o le exiges más y llegas a necesitar cargarlo, la buena noticia es que cuenta con la tecnología Turbo Power y mejor todavía que en la caja viene el cargador, con el que puedes conseguir hasta 6 horas de duración de batería con sólo 15 minutos de carga.
Mejor desempeño en Moto G5 Plus
Y ya entrando en el apartado de especificaciones, qué hay dentro del nuevo Moto G5 Plus, bien, tenemos una mejora en el procesador, pasamos de un Snapdragon 617 de ocho núcleos a 1.5GHz a un Snapdragon 625, también de ocho núcleos, pero que ahora corren a 2.0GHz, eso sí, en la memoria RAM nos quedamos igual con sólo 2GB, cosa que tiene molestos a muchos usuarios ya que se sabe que hay versiones con más RAM, pero lamentablemente no llegarán a México. En cuanto al almacenamiento tenemos 32GB para la versión disponible en México, que es el doble de lo que teníamos el año pasado.
El desempeño con apps como las que ya les mencioné es bueno. Si usas Facebook, WhatsApp, Waze, correo electrónico, Uber, Clash Royale y todas las básicas no tendrás ningún problema, incluso si las tienes abiertas al mismo tiempo.
Incluso estuve utilizando juegos con gráficos más demandantes, como Asphalt 8 o Real Racing y no sentí que el comportamiento del teléfono fuera lento, de hecho los juegos no se trabaron ni mucho menos.
Eso sí, con todo y el cuerpo metálico, no sentí que el teléfono se calentara en ningún momento y eso me parece bastante bueno.
¿Realmente tenemos una mejor cámara?
Ahora vamos al tema de la cámara que es una de las cosas que más les interesan. Y es que también sufrió cambios. El sensor pasó de los 16 megapixeles en el Moto 4 Plus a los 12 en el nuevo Moto G5, pero ojo, esto no es necesariamente malo, pues más megapixeles no necesariamente es más calidad sino imágenes más grandes.
En fin, como les comentaba, el Moto G5 tiene cámara con sensor de 12 megapixeles y ahora con un lente que tiene una apertura de diafragma de 1.7, que permite que entre más luz. En el Moto G4 la apertura es de 2.0. Además, Moto incluyó la tecnología Dual Autofocus Pixels, lo cual permite hacer enfoques mucho más rápido.
Las imágenes con luz natural salen bastante bien, incluso si el sujeto se está moviendo, eso se debe en parte gracias a la tecnología Dual Autofocus Pixels.
Aquí les dejo algunos ejemplos de las imágenes que he tomado con este Moto y ustedes escriban en los comentarios.
Es importante resaltar que sí, el teléfono tiene un lente con mayor apertura de diafragma y eso se refleja sobre todo en las capturas nocturnas, aunque no hay que olvidar que se trata de un teléfono de gama media. Acá les dejo algunos ejemplos.
Vale la pena destacar que, así como lo tiene el Moto G4, el nuevo Moto G5 mantiene el modo manual para la cámara, que te permite manipular varias opciones para que las fotos salgan más a tu gusto.
Por otro lado, es importante decir que este teléfono ya puede grabar videos con resolución 4K, cosa que la generación anterior no tenía, sin embargo, aún nos falta un estabilizador óptico de imagen.
Finalmente tenemos la cámara frontal, que cuenta con un sensor de 5 megapixeles con una apertura de diafragma de 2.2, nada espectacular, pero cumple con su propósito. Eso sí, cuenta con modo de belleza que puedes configurar en automático o hacer ajuste manuales.
¿Son suficientes mejorías para aumentar 25% el precio?
Cierro la reseña con el precio que Moto anunció para este nuevo teléfono: $6,999 pesos, que son prácticamente $1,400 pesos más que lo que costaba en su momento el Moto G4 Plus. Razones puede haber muchas, entre ellas el tipo de cambio, sin embargo, ya es decisión de cada uno de ustedes si están dispuestos a pagar este precio por las mejoras y cambios que tiene este teléfono, como el cuerpo metálico, la cámara con tecnología de enfoque Dual Pixels y 32GB de almacenamiento.
Vale la pena recordar que el Moto G4 Plus aún no cumple un año de haber salido, por eso la recomendación es que, si tienes este teléfono puedes esperar a la siguiente generación. Pero si tienes un Moto G3, quieres seguir con Moto y puedes invertir $6,999 pesos o pagar la diferencia que resulte de un plan post pago, sí te conviene migrar a este teléfono, pues además de mejoras en desempeño y cámara, ya cuenta con Android 7.0.
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