Todo el asunto del espionaje por parte de la NSA -la Agencia de Seguridad Nacional de los Estados Unidos- ha causado revuelo en varias partes del mundo, haciendo que más de uno se pare de cabeza ante de la posibilidad de que sus conversaciones hayan sido monitoreadas. Para la NSA trabajan lingüistas, programadores, hackers, criptógrafos y toda una amplia gama de expertos que se ocupan de velar por la seguridad del país, labor que algunos califican como espionaje.
Sin embargo, desde hace unos meses se dio a conocer que esta organización sabe "todo" de los usuarios y eso no le ha gustado a muchos. Tal es el caso del gobierno de Rusia, que le pidió a Apple y a SAP (empresa especializada en soluciones de software) que revelen su código fuente para asegurarse de que ninguno de los productos de la manzana utiliza sus herramientas para espiar a los organismos de estado de su país. Esto, luego de que gracias al excontratista de la NSA, Edward Snowden, se enteraran de que la agencia cometía monitoreos ilegales a través de servicios populares en internet.
La agencia de noticias Reuters afirma que los expertos han llegado a la conclusión de que las normas para el cifrado de software respaldadas por el gobierno de los Estados Unidos están hechas para “crear puertas traseras” que le permiten a la NSA espiar a los usuarios.
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La petición por parte de Rusia se dio a conocer hace unos días, cuando el ministro de Comunicaciones, Nikolai Nikiforov, se reunió con el gerente general de Apple en Rusia, Peter Engrob Nielsen, junto con el director de operaciones de SAP en aquél país, Vyacheslav Orekhov, en donde revisaron temas de seguridad nacional, entre otros asuntos.
Desde luego, obligar a empresas como Apple a exponer públicamente el funcionamiento interno de su software es una medida que representa una amenaza, ya que los creadores podrían perder el control sobre su código fuente. Sin embargo, los gobiernos de Alemania, Brasil, China, India, entre otros, se unieron a la petición rusa de que les permitan "echarlo un ojo" al software de Apple.
Pero a todo esto ¿qué implica revelar el código fuente? El código fuente es el conjunto subyacente de instrucciones que controlan el funcionamiento de cualquier software y lo traducen en instrucciones legibles para ordenadores.
El código fuente son “las joyas de la corona” para cualquier fabricante de software y éste es guardando celosamente. ¿Por qué? Porque en él se expone la forma de trabajo de todo un equipo y ciertas funciones o procesos pueden ser plagiados, lo que generaría otra ola de problemas aún más grande, como demandas por derechos de autor. Es muy sabido que la empresa de la manzana cela y cuida mucho su software; incluso muchas de sus animaciones clásicas no pueden ser reproducidas por desarrolladores terceros aunque tengan una licencia de Apple.
"Las empresas que dan a conocer el código fuente de sus programas no ocultan nadas, pero los que no tienen la intención de establecer una cooperación con Rusia, pueden tener capacidades no declaradas en sus productos", dijo Nikiforov.
