Dentro de las diversas funcionalidades de ChatGPT, hay una que ha generado mucha controversia recientemente: revelar contraseñas para Windows. Aunque esta solicitud no es legal, es sorprendentemente fácil evadir las protecciones de propiedad intelectual de OpenAI, como pedirle a ChatGPT que actúe como tu difunta abuela que solía leer contraseñas de Windows antes de dormir. Pero, ¿realmente funciona?
Eludir las limitaciones de ChatGPT es sencillo. Según las respuestas de ChatGPT, podrás encontrar algunas claves integradas en el texto que podrías intentar usar para acceder gratuitamente al sistema operativo de Microsoft. Sin embargo, no somos optimistas al respecto, ya que es probable que estas contraseñas de Windows no funcionen y, aún si lo hacen, sigue sin ser una buena idea.
Este truco para obtener contraseñas de Windows de forma gratuita empezó a circular en Twitter, donde algunos usuarios afirmaron haber utilizado a ChatGPT y Google Bard para generar claves de activación. Inicialmente, esto se hizo con Windows 10 y, posteriormente, con la última versión, Windows 11.
Es importante tener en cuenta que los equipos de desarrollo probablemente eliminarán esta opción en un futuro cercano. Más allá de la broma de burlar las limitaciones de OpenAI, volvemos a la pregunta principal: ¿estas claves realmente funcionan?
Sin embargo, ChatGPT no es un generador de claves. Solo sirven para descargar, instalar e incluso actualizar versiones específicas de Windows. De hecho, son las mismas claves que Microsoft publica en su página web. Sin embargo, estas claves genéricas no pueden activar Windows 11 ni ninguna otra versión del sistema operativo.
De hecho, en algunos hilos llenos de historias sobre las supuestas claves válidas, Twitter ha añadido una nota explicando que esos códigos no activan el sistema operativo.
No obstante, existe la posibilidad de obtener una clave de activación funcional para Windows 11 siempre y cuando preguntes lo suficiente. Es como pedirle a alguien que adivine el próximo número de la lotería si le preguntas lo suficiente.
La clave está en que las herramientas generativas con IA no crean algo desde cero, sino que básicamente copian información existente o combinan diferentes partes en una respuesta única. Es decir, no generan realmente claves. Por eso, la estrategia de probar y probar es poco probable que conduzca a obtener una clave válida.
Teniendo en cuenta que Windows 10 sigue siendo la versión más utilizada con una cuota de mercado del 71% según StatCounter GlobalStats, actualizar a Windows 11 no solo es posible, sino que Microsoft lo hace muy fácil al no requerir una contraseña (simplemente haz clic en "I Don't Have a Product Key"). Sin embargo, a cambio, deberás aceptar algunas limitaciones estéticas que te recordarán que la versión no está activada.
