parentesis.com/

Review - ‘Skull & Bones’, un juego de piratas con potencial por explorar


Después de múltiples años de desarrollo, Skull & Bones llega con su propuesta bucanera online

por: Uriel Barco Uriel Barco

portada de nota

La imagen cultural que tenemos del pirata se estableció en nuestro folclor por aquellos personajes que, de los siglos XVI a XIX, aterrorizaron los siete mares para saquear y robar las riquezas de los navíos provenientes de las entonces colonias europeas en los continentes americano y asiático, así como de diversos puertos. Es una imagen que, más allá de los hechos históricos, se instaló en el lenguaje pop gracias al éxito de diversos trabajos de ficción como La isla del tesoro, Peter Pan y Piratas del Caribe. Y, en el circuito de los videojuegos, se convirtió en la imagen fundacional de dos juegos de la firma francesa Ubisoft separados por 11 años de distancia: Assassin’s Creed IV: Black Flag y Skull & Bones.

 

 

Era necesario empezar estas líneas recapitulando el impacto pop / cultural de los piratas, pues con Skull & Bones Ubisoft busca volver a condensar la magia de la experiencia bucanera que ofreció en su momento con Assassin’s Creed IV: Black Flag, ahora sin la necesidad de supeditarse a los márgenes y costumbres de una saga preexistente y poniendo el foco en una extensa jornada que, en razón de su live service, se alimenta constantemente.

 

La encargada de esta encomienda fue Ubisoft Singapore, desarrolladora que ya tenía historial trabajando con la franquicia Assassin’s Creed, y que ahora con Skull & Bones ofrece un mundo abierto cooperativo en el que el objetivo es crear un imperio bucanero y convertirse en el más infame pirata que ha existido.

 

Situada en el Siglo XVII, durante la época dorada de la piratería, la aventura inicia con una bombástica batalla naval en algún lugar del Océano Índico. Tras una desastrosa derrota y después de ser rescatado por otros sobrevivientes, el personaje central deberá construir un nuevo barco para surcar los mares, subir el nivel de infamia, obtener el respeto de los piratas de la región y, eventualmente, convertirse en el líder.

 

 

​El loop central de Skull & Bones descansa en manejar eficientemente la flota, darle su respectivo mantenimiento, obtener las herramientas necesarias para recolectar recursos y completar las misiones secundarias que se encuentran repartidas a lo largo del mapa, aristas que a su vez convergen en la construcción y reforzamiento de barcos más poderosos para saquear asentamientos, capturar zonas de producción y atacar barcos de las facciones enemigas.

 

Al ser un juego cooperativo en línea, el usuario podrá apoyarse de otros jugadores para completar tareas, participar en eventos mundiales y enfrentarse en batallas de jugador contra jugador. Por lo mismo, es imperativa la coordinación en equipo, ya que cada navío puede desempeñar uno de entre tres roles: Daño, Soporte y Tanque. Como es de esperarse, una correcta designación de dichos roles será la clave para salir avante, sobre todo, en aquellos eventos mundiales en los que el servidor entero apunta hacia finalidades específicas, como por ejemplo hundir un barco élite.

 

Recolectar recursos, construir barcos, reforzarlos, saquear asentamientos y atacar barcos es, como dijimos líneas más arriba, el loop central de Skull & Bones y es ahí donde yacen tanto los aciertos como los tropiezos.

 

A pesar de que hay secciones del mundo que se recorren a pie, la propuesta real de gameplay está destinada a situaciones a bordo del barco, reduciendo de golpe el campo de acción que tendrá el usuario. El combate en tierra firme es inexistente, lo que hace que el producto final se sienta carente de un aspecto mayúsculo, sobre todo si se hace la comparativa con Assassin’s Creed IV: Black Flag. Y aunque quizá Ubisoft Singapore jamás pretendió lanzar un sucesor espiritual de dicho juego, lo cierto es que el ADN está ahí y se percibe de inmediato.

 

 

En otras palabras, quienes esperen que el personaje central participe en asaltos a pie en los diversos puntos de interés o en los barcos a capturar, es probable que queden desconcertados al observar que el único propósito del desembarque es hablar con NPCs, conseguir mejoras para el navío, guardar cargamentos y completar los minijuegos de mapa del tesoro, situación que debe valorarse a profundidad antes de tomar una decisión de compra.

 

Insistimos, la experiencia pirata que ofrece Skull & Bones tiene todo el potencial para dejar satisfechos a quienes solo estén en busca de una faceta bucanera en el mar, a aquellos que no tengan ningún problema con permanecer en el ciclo recolectar – entregar – completar misión – mejorar navío – repetir. Pero quienes esperen encontrar en este juego una propuesta más integral, es probable que rápidamente se sientan estancados en una dinámica repetitiva, a veces con sabor a beta, a la que le hizo falta un mayor sentido de inmersión.

 

Esperemos que Ubisoft no desatienda Skull & Bones y que le añada más contenido y funciones a través de actualizaciones, pues lo cierto es que nos encontramos ante un título cuyo componente social entretiene y al que solo le hace falta apretar algunas tuercas para sentirse como representante moderno de la imagen del pirata en la conversación pop.

Comenta:

separador de nota