En compañía de SEAT te daremos algunos consejos que debes evitar al momento de viajar y usar el aire acondicionado.
¿Sabias que se invierten hasta tres años para desarrollar un sistema de refrigeración para cada modelo? Y aunque está planeado para tener un funcionamiento excelente, muchas personas no lo emplean como deberían.
Usar correctamente el aire acondicionado.
Evita usar el aire acondicionado al máximo.
Antes de encender el aire, abre las puertas y las ventanas para ventilar el interior del vehículo, se recomienda hacerlo durante un minuto. Como bien comenta Ángel Suárez, ingeniero del Centro Técnico de SEAT, con esta acción se puede “disminuir de forma natural la temperatura interior”. Cuando el interior esté ventilado, ya puedes activar la climatización.
La opción Auto es la adecuada
Si eres de los que activan el botón de recirculación del aire, tenemos que decirte que lo estás haciendo mal pues esa opción “favorece a que los cristales se empañen”.
Lo ideal es conducir con la opción Auto encendida para que el flujo de aire se autorregule, sea más homogéneo y se haga un uso más eficiente.
Sólo cuando la temperatura sea alta
Aunque muchas personas ocupan el aire acondicionado por la mañana, más cuando está “fresca”, tenemos que decirles que están mal.
A ellos, les aconsejamos activar el aire acondicionado del auto cuando sea con la temperatura más alta del día. Gracias a esto, evitarán que los cristales se empañen cuando se eleve ligeramente la temperatura exterior.
Dale dirección al aire
Seguro cuando vas con tus amigos uno de ellos te dice, “súbele que no me llega” y tu reacción es acomodar el difusor hacia la persona con la intención de que le llegue, pues esa práctica es incorrecta.
Lo correcto es darle dirección al aire, con eso se consigue un reparto adecuado del mismo. “Los difusores tienen que estar enfocados hacia arriba, no hacia la cara. Así el aire se reparte por todo el vehículo y que llegue a todos los pasajeros de manera uniforme”, comenta Suárez.
Hay que darle mantenimiento
Sí, efectivamente tu aire acondicionado requiere de uno y muy a fondo. Al igual que el aceite, las llantas o el líquido de frenos, el sistema de climatización de los autos también necesita un mantenimiento específico.
Se recomienda cambiar los filtros cada 15,000 o 20,000 kilómetros, así no se perderá fluidez ni tampoco fuerza cuando salga el aire.
